
Después de varias tormentas….que venga ya la calma!
Vamos a empezar el 2023 con los deseos de que este sea el año de la calma, de la reflexión, de luchar por aquello que
Psicólogo Especialista en Psicología Clínica
Infancia y Adolescencia
Se acerca el verano y nos enfrentamos a mucho tiempo libre a la vista para los estudiantes y eso, muchas veces activa los pensamientos. Algo hay que hacer y si se puede aprovechar al máximo, mejor. Para muchas familias es el momento de programarse y para ello recurren, entre otras formas de ocio, a los campamentos de verano. Todo un mundo repleto de variedades. Nos enfocamos en los que se orientan en la recuperación de los trastornos de la conducta alimentaria (TCA).
Los campamentos terapéuticos para pacientes con TCA tienen como meta contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas afectadas procurando la mejora de su atención, tanto en los aspectos médicos como en los psicológicos y sociales. Durante una semana o más, las adolescentes (son mayoría mujeres) conviven entre ellas y con su enfermedad. Se busca que rompan con la rutina que han mantenido durante el año. Tanto si han estado ingresadas o en hospitales de día. Es importante que compartan experiencias y que vean que no están solas.
Salen de su entono habitual para vivir una experiencia que les permite alejarse de su enfermedad. Participan en actividades que les proporcionan recursos para que descubran que pueden vivir sin pensar a todas horas en la alimentación o en su cuerpo, desviando la atención a otros asuntos que les permitan evadirse. El campamento cuenta con un plan de actividades que abarcan todo el día. Las tareas lúdicas son actividades que no suponen un desgaste físico importante, por lo que se centran en distintos aspectos de la creatividad artística y mucho mejor si se realizan en plena naturaleza.
Los campamentos terapéuticos proporcionan un entorno estructurado para pacientes con necesidades físicas, psicológicas o ambas. El entorno brinda oportunidades para trabajar en problemas específicos, desarrollar más habilidades y experimentar un mayor equilibrio emocional. Los campistas pueden llevarse sus experiencias con ellos cuando se vayan e integrarlas en su vida cotidiana. Aquí, las personas aprenden a cooperar entre sí en las tareas. Pueden asistir a sesiones de terapia en grupo y en solitario, trabajar en actividades con otros campistas y desarrollar habilidades sociales, muy útiles en la realidad de nuestros días. Además de experimentar beneficios como una mejor regulación emocional en respuesta a situaciones estresantes.
Es importante también trabajar la imagen estricta de la belleza de la mujer que hemos forjado ya que no se corresponde con la realidad e influye de forma muy negativa en las adolescentes. Se intenta con ahínco que las jóvenes vean la belleza de la diversidad que cada uno tiene, su personalidad y que eso forma parte del atractivo de una persona. Está muy bien cuidarse, pero es también primordial aceptarse. Y para ello hay que insistir en que la sociedad de cabida a las diferentes formas de estética. Afortunadamente, aunque tímidamente, ya se ha empezado a luchar contra la dictadura de la belleza de pasarela. Hay más empresas que se implican más y se van adaptando a todos. Además, todos tenemos que implicarnos más en la construcción de estereotipos normales, de la calle, alejados de los cánones de belleza que imperan en la sociedad y que la mayoría de los medios y plataformas transmiten cada día.
También es imprescindible que las administraciones sigan apostando por acciones y medidas que ahonden en la promoción y seguimiento de hábitos de vida saludables entre nuestros jóvenes. Creo que salud, deporte y naturaleza es un buen trío para no alejarse de él. Necesitan una experiencia de normalidad. Qué se las escuche, ayude, y no se las juzgue.
Nos fijamos en Adaner (www.adaner.org) , fundada en 1991 por un grupo de familiares de pacientes con anorexia y bulimia nerviosa, por enfermeros y profesionales clínicos. Esta asociación fue declarada de utilidad pública en abril de 1998 y desde hace ya muchos años organiza, junto a algunas delegaciones del país, campamentos de verano para lucha contra los TCA. Además, entre los fines y objetivos de la asociación, destaca su labor en aras de contribuir a la mejora de la calidad de vida de los pacientes con estos trastornos alimentarios. Asimismo, también procura la mejora de la atención, tanto médica como psicosocial, de estos pacientes, y difunde todos los aspectos relacionados con estos trastornos, con el objeto de sensibilizar a profesionales de la salud, de educación y servicios sociales, y al conjunto de la sociedad en general.
Vamos a empezar el 2023 con los deseos de que este sea el año de la calma, de la reflexión, de luchar por aquello que
Los datos ponen los pelos de punta. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 1.000 millones de personas en el mundo viven